Cáncer cervicouterino

Una de las enfermedades más peligrosas de nuestros tiempos es sin duda el cáncer. Se trata de una condición en la que las células del cuerpo comienzan a multiplicarse de manera incontrolable. Su identificación depende de la parte del cuerpo en donde aparezca por primera vez, aunque probablemente se propague posteriormente.
Uno de los cánceres más comunes y graves (sin no se atienden a tiempo) es el cáncer cervicouterino, el cual se origina en las células que revisten el cuello uterino (parte inferior de la matriz). En realidad, el cuello uterino es la parte más estrecha del órgano y sirve de conexión con la parte superior del útero, con la vagina. El útero, también llamado matriz, es donde se desarrolla el feto cuando las mujeres se embarazan.
Si bien, el cáncer cervicouterino manifiesta algunos cambios precancerosos, los médicos los clasifican de la siguiente manera: neoplasia intraepitelial cervical (CIN), lesión intraepitelial escamosa (SIL) y displasia.
El cáncer cervicouterino puede manifestarse en cualquier mujer, pero con más frecuencia en mayores de los 30 años de edad. La causa principal es una infección duradera de ciertos tipos del virus del papiloma humano
(VPH).